martes, 15 de octubre de 2013

Querido diario:

Revolviendo entre papeles que había encontrado dentro de mi cajonera encontré un papel firmado por una chica. Comencé a leer la carta e inmediatamente se me llenaron los ojos de lágrimas. Allá voy a narrarla: "0 ganas de volver a empezar. Triste que la historia se repita de nuevo. Casi perder todo por una tontería. Hacer esa locura fue lo peor que hice y no pensé en lo que podía dejar atrás, esas personas que me quieren y que son importantes para mi. 
No estuvo bien lo que hice. Me arrepiento de ello. Sobre todo la imagen que no se me borrará de la cabeza al ver como la sangre caía por mi brazo y a la vez me sentía aliviada. Es todo frustrante. Romper a llorar porque el miedo se apodera de tu cuerpo y no parar de escuchar el "¿por qué lo has hecho?" en tu cabeza.
Fue todo demasiado rápido.
A la tercera va la vencida. Sí, fue la tercera vez que lo intentaba y la primera que lo hacia. Vi como solución única a todo el matojo de problemas que poco a poco se apoderaban de mi mente. Escocía. Este relato es para poder echar todos los pensamientos que tengo en mi cabeza después de aquella noche.
Las personas que se han enterado, en menos de 24 horas me han hecho ver que la vida es bonita. Que si ella no me sonríe, que yo lo haga y sobre todo que no se me vuelva a ocurrir por la cabeza lo de la noche de marras.
Me prometo a mi misma que nunca más lo volveré a hacer.


 8 de octubre."                     

La desesperación de esta chica se apoderó por unos instantes y fue lo peor que pudo hacer, lo que pensó que era la mejor opción. Lo triste no es lo que hizo, lo triste es que la chica fui yo.                              

domingo, 6 de octubre de 2013

¿De qué sirve tener buen cuerpo, si no enamoras a nadie? Una pregunta tonta donde las haya, pero ese tipo de pregunta me come la cabeza todos los días. Siempre que me he sentido in love con algún chico o algo me daba de morros con el muro, ¿por qué? Sencillamente porque jugaba conmigo a ver si conseguía lo que él quería. Por eso ahora odio al tipo de chica "guarra" o "fácil al abrirse de piernas" porque en esta vida lo que hay que es hacerse respetar. No me gusta ese tipo de chicas, de esa manera demuestran que son un objeto sexual y que no son personas. No hay que utilizar a las personas de esa manera porque más que placer lo que les vas a proporcionar es daño psicológico. Estoy harta de que las mujeres seamos utilizadas como juguete o cualquier cosa, luego nos enamoramos y nos dan por todos lados. Estoy harta de ser ese tipo de chicas que es la menos querida y que siempre está como segunda opción. Ahora el mundo se rige por el físico no por la mente. Así vamos mal.