No me gusta hacerme fotos. Sencillo. Poner una sonrisa delante de una cámara cuando lo único que quieres es llorar. ¿Fotos? ¿Para qué? ¿Para tener que verme todos los defectos que rodean mi cuerpo? No gracias, fotos en mi vida no. Ya es suficiente tener que verme en el espejo.

¿Pero qué ha pasado? Frase sonada estos días. ¿Quieres saber que ha pasado? Que una se encuentra con buena fe, confiando plenamente en gente a la que le has dado una oportunidad tras otra y.. ¡qué raro!, te vuelven a fallar.
Tampoco es tan raro, estaba sobre aviso. La gente es así y actúa por su propio beneficio. ¿Tergiversamos? la palabra de moda, tan difícil no será decir la verdad, ¿no?
Total, que llegamos a un punto de inflexión en el que la mentira es lo más "divertido" y más si se consigue hacer daño a la otra persona. Una pizca de mentira más un trocito de tergiversación con un toque de ser muy puta y eh voilà! Un combinado perfecto para que todos te crean y estén en mi contra. Qué divertido, ¿no? Has conseguido lo que querías, hacerme daño, verme mal y encima dejarme sin mis verdaderos amigos. Ay pequeña, cuando te queda por aprender. Que sepas que siendo una niñita consentida no vas a conseguir las cosas, por mal camino vas. Pero bueno cada una por su camino, que yo por el tuyo ya no aparezco.